Se me revela la bilis en mi pobre vesícula cuando oigo justificar en nombre de la tradición y la cultura, todo tipo de barbaridades y crueldades con animales.
Desde mi simplona forma de ver la vida, putear a un animal, sea o no tradicional, tiene que dejar de hacerse YA! dado que somos un pueblo que evoluciona, se supone.Sino podríamos seguir quemando a las brujas en plaza pública que también le molaba mucho a la plebe. Besos rebeldes.
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